Dios en su magnificencia creó a la raza humana como seres integrales , con tres componentes que se integran y complementan mutuamente el espíritu, el alma y el cuerpo.
Nuestro espíritu el cual es la parte más profunda y escondida de nuestro ser. Es mediante nuestro espíritu que tenemos contacto con la esfera espiritual. Ninguna otra criatura fue creada con esta tercera parte: el espíritu. Es por el espíritu que Dios puede ser real para nosotros y que lo podemos contactar, recibir, contener y tener comunión con Él..
Nuestra alma es invisible, pero es tan real como nuestro cuerpo, es por nuestra alma que experimentamos las cosas de la esfera psicológica, su significado viene de la palabra griega psujé, que es también la raíz de psicología
Los componentes del alma son la mente, la cual nos permite hacer cosas como pensar, razonar, considerar, recordar e imaginar;
Nuestras emociones las cuales nos permiten tener sentimientos como la felicidad, el dolor, la ira, el alivio y la compasión;
y de nuestra voluntad, la cual nos permite escoger y tomar decisiones.
Nuestro cuerpo por medio de sus cinco sentidos tiene contacto con las cosas del mundo material que se ven y se pueden tocar. El cuerpo es la parte más externa y visible de nuestro ser, y es por el cuerpo que existimos
En todos los escenarios donde el ser humano se mueve , estos tres componentes deben estar alineados , para que nuestra vida se encuentre en equilibrio
Dios así lo ha determinado y su palabra lo dice en 1 de tesalonicenses 5:23
“Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de Nuestro Señor Jesucristo,
Y ser guardado irreprensible significa que estas tres partes deben ser coherentes, estar alineadas, no tener oposición entre ellas , esta es la esencia de una vida feliz
Por: Luz Stella Ortiz de Román
Presidente Fundadora Compañía RSO s.a.